Páginas

PODEMOS: LA APOTEOSIS DE LO POLÍTICO


PODEMOS: LA APOTEOSIS DE LO POLÍTICO


Destaca Santos Juliá en "El País" de ayer el respeto y fascinación que muestran Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero por Carl Schmitt un asunto que me parece tan revelador  como inquietante.
Que este politólogo alemán, militante del Partido Nacional Socialista en el que ocupó cargos entre el año 1933 y 1936, sea el mentor de la estrategia de Podemos es significativo. Schmitt impugna la concepción liberal de la política y  se propone renovarla, concibe que por encima del individuo activo  ha de alzarse el Estado como "comunidad suprema" o ente total al que sirva toda acción social.
Romper la dicotomía entre el Estado y el sujeto es el objetivo último de la concepción del alemán, este principio ayuda a explicar ese otro concepto tan querido por la organización de Pablo Iglesias, "la gente" que, como bien asevera Juliá, no es el pueblo ni es el proletariado, es un concepto mucho más abstracto y difuso que bien podría representarse en ese cartel de la asamblea de Rivas que reproduce un sujeto borroso y turbio sin rostro ni señas particulares que camina en un paisaje neutro.  Del imaginario del nuevo partido ha desaparecido el individuo para emerger un ente orgánico constitutivo de la gran máquina del orden y el poder.

Conciben la política como categoría suprema de la vida social por lo que se definen desde ésta condición y no como intelectuales o desde cualquier otra esfera, en ello coinciden también con Carl Schmitt que en "El concepto de lo político" ahonda en una revisión de esa noción, que ya era central en la sociedad liberal, para reforzarla significativamente. Lo político es, según Schmitt, el arte de "definir al enemigo", es pues la enemistad el centro de toda acción política, la lucha y la polémica que excluyen la colaboración, el debate, la crítica constructiva y el acuerdo. En última instancia la política es la guerra por otros medios porque la guerra es la única verdad incontrovertible de la vida social.
Definir y golpear al enemigo es la prerrogativa del Estado, el antagonismo y la liquidación de toda desviación es la esencia de la política.
En la polémica entre las dos formas de dictadura estatal, la parlamentarista y la totalitaria Schmitt se decanta firmemente por la segunda aunque el tiempo ha demostrado que no hay un abismo entre ambas sino mucha más cercanía e identidad por lo que Podemos tal vez no tenga que definirse al respecto.
En última instancia tanto Schmitt como Podemos expresan la emergencia de la sociedad super-ideológica, de las polaridades cerradas y la persecución como enemigo de toda desviación de la ortodoxia, la sociedad de los credos doctrinarios y la superación del enfrentamiento por la fuerza del poder estatal, de la desaparición del individuo, de lo privado y lo no-político.
La revolución, por contra, precisa de movimientos transversales, superación de las ideologías, ascenso de lo privado, de la iniciativa individual y cooperativa, capacidad para la convergencia, auto-gestión y avance de lo pre-político.
La revolución parte justamente del concepto de amistad como cualidad supra-ideológica capaz de integrar y dar un espacio a la afinidad y a la controversia como factores de lucha por la verdad y la mejora social.
La revolución exige el ascenso de personalidades poderosas y auto-construidas que sumen su acción al caudal de lo social, eso es el pueblo (que no "la gente"), porque el pueblo tiene un alma colectiva prendida de la singularidad de cada uno de sus miembros.
Es cada vez más evidente que Podemos se expresa como la anti-revolución y el ascenso de un nuevo totalitarismo, no extraña que sientan "fascinación" por el politólogo del nazismo.




11 comentarios:

  1. No me parece justo lo que dices, escribí sobre Carl Schmitt en su momento.
    No es cuestión de conceptos, es cuestión de la agenda de los políticos profesionales que no coincide con la de los ciudadanos de a pie.

    Quizás no coincidimos en temas políticos, pero por favor, no caigamos en acercar al nazismo a todo lo que no es política convencional y se presenta amenazante para los que llevan tooooda su vida viviendo del cuento. Que es lo que desgraciadamente pasa aquí.
    La guerra la hace quien decide que el dinero público tiene que irse a pagar una deuda contraída por negocios privados.
    No salgo de mi asombro de seguir viendo Bankia anunciándose por todas partes después de la estafa que hubo...

    El nazismo y carl Schmitt no tienen nada que ver aquí.
    Solo que hay quien teme que el chiringuito se les caiga.

    Me parece un signo de credibilidad las renuncias a los altos salarios. Y también que hasta el recién nuevo PSOE está haciéndose "con la misma letra", se han dado cuenta gracias a estos de que tenían que cambiarla sino quieren seguir desangrándose.

    Sé que hoy es difícil y en España más, país de listillos, poner la mano en el fuego por
    nadie.
    En cuanto a Santos Juliá, precisamente, como reputado historiador de España contemporánea tendría unas cuantas preguntas, no sobre lo que dice, que le oído con frecuencia y leído. Sino sobre lo que calla, y estoy segura de que si por un casual, no creo, leyera esto, sabría a que me refiero.

    ResponderEliminar
  2. Ana, Pablo y compañía son admiradores de Lenin y Robespierre, aparte de Chávez. El problema está en los que, con ingenuidad bienintencionada, pensáis que el nuevo partido es lo que no es. Quiero decir que no todo vale contra el PP y el PSOE. Podemos es la izquierda totalitaria reconvertida a un lenguaje "participativo". Una estafa con un programa insostenible, demagógico, que o bien no va a aplicar, o si lo aplicara arruinaría aún más el país. ¿De dónde van a sacar el dinero para una Renta Básica, un Estado de Bienestar a lo sueco y gratuidad de servicios?, eso por limitarnos a lo económico. Por favor, quienes sostiene tales opciones son responsables de las consecuencias.

    ResponderEliminar
  3. "Me parece un signo de credibilidad las renuncias a los altos salarios." (Ana A).

    Tú lo has dicho, Ana, han renunciado a los altos salarios (altos), aunque quedándose un jugoso salario de cerca de 2.000 euros, muy por encima de la media, y, sobre todo, NO HAN RENUNCIADO A LAS DIETAS. Además, el dinero restante que van a "donar" se lo darán a organizaciones afines a ellos mismos, con lo que en la práctica se lo van a quedar, no a nivel de personas, pero sí a nivel de organización.
    ¿Qué hay personas (los políticos del PP, PSOE, IU, etc) que llevan "tooooda su vida viviendo del cuento". Pues sí. Y ahora dime: ¿crees que la aspiración vital de Pablo Iglesias & cía es subirse a un andamio a poner ladrillos una vez finalice la legislatura para la que ha sido elegido? Hay castas, paleocastas, neocastas y castas en gestación. Y, desgraciadamente, también hay gente que sigue esperando la venida del Mesías.
    Dentro de 20 años hablamos, y vemos en qué quedó lo de Podemos...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿tu qué propones a cambio? ¿cómo lo harías? Desde el anonimato se puede decir lo que uno quiera y más alla-
      Si llegan y no hacen lo que con tanta claridad están diciendo que piensan hacer, se les retira el apoyo.
      De momento no sabemos nada pero ilusionan y peor que lo que hemos conocido es difícil, más ladrones no se puede ser. Sólo no robar y decirnos al pueblo con toda la cara que hemos gastado de más ya es un avance

      Eliminar
  4. Si,es un fascista vestido de perroflauta,pero lo que vale es cómo actúa y como piensa,no como vista.En esta sociedad son más importantes las apariencias y por eso se lleva a la gente de calle.Bendita sociedad...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Efectivamente, es un fascista vestido de perroflauta; ¿esperabais al perroflauta de hamelin que se lleva a la gente de calle, vestido con camisa azul y bigotito franquista, en plena era de la mercadotecnia?

      Eliminar
  5. Con casaca de mandarín o con indie look Pol Pot sigue sigue siendo el mismo. En lo referente a su comportamiento, es como todo politicastro profesional vendiendo motos por la tele, no sé qué mérito puede haber en arrear a las chochonas seniles de Intereconomía mientras reclama lo que todos: más estado, más fuerzas armadas opresoras, más eficacia fiscal...
    ¿Nadie recuerda a Felipe Gonzalez y PSOE en 1978...?

    ResponderEliminar
  6. Bendito intercambio de opiniones.Es necesario para in-formarse.El NUCLEO CENTRAL de Podemos es el concepto de CASTA.Es de lo unico que se habla.Osea que el problema mas importante que tiene nuestra SOCIEDAD CAPITALISTA es la existencia de una casta (clase) politica,una vez resuelto este problema,sustitucion de una casta(clase)por otra todo resuelto.Hemos realizado la REVOLUCION. Todo el mundo puede creer en lo que quiera.Incluso esperar un MESIAS SALVADOR que nos salvara de esta triste vida.Lo comprendo pero no lo comparto.Una de las criticas mas evidentes que le hago a PODEMOS ,es su falta de pedagogia.Esta dando una imagen de la sociedad que no es verdadera ya que no habla de las AUTENTICAS RELACIONES DE PODER ,DE LOS AMOS DEL MUNDO,DE LA SOCIEDAD CONSUMISTA,DEL EJERCITO ,POLICIA (estan de acuerdo con ellos)...le estan creando a la ciudadania unas falsas esperanzas de solucion de sus problemas.Quien puede ceer que con una simple sustitucion de una CASTA por otra ya esta todo hecho.Os acordais de aquello de: QUITATE TU PARA QUE ME PONGA YO.O aquel otro EL AUTENTICO PARTIDO REVOLUCIONARIOsustituido ahora por LA AUTENTICA CASTA REVOLUCIONRIA...y pensando ahora que las propuestas de PODEMOS sean REVOLUCIONARIAS me hacen sospechar que haya sido el propio PODER el que haya promocionado a PODEMOS , a traves de sus medios de comunicacion al lugar que ahora ocupa y la HISTORIA nos enseña que los AMOS DEL MUNDO nunca entregan el PODER al PUEBLO asi de facil.

    ResponderEliminar
  7. Hola a todos, soy juan ramón.

    Hemos pasado de una jerarquía totalitaria declarada, como el franquismo, a una jerarquía totalitaria votada por el pueblo. Al haber perdido como pueblo nuestra identidad después de cuarenta y cinco años de dictadura, que vino tras una masacre entre hermanos, nos dejamos llevar por los "expertos" políticos, y nos cuesta analizar en profundidad los procesos políticos. Nos hemos convertido en una sociedad que tiende a legislar todo y a ampliar las leyes lo máximo posible y a aplicarlas por la fuerza si es necesario. Por lo cuál tenemos por un lado un pueblo e individuos anulados para reflexionar en profundidad y por otro un proceso democrático a través del que se supone que estamos contribuyendo al bienestar común delegando las decisiones trascendentales a un puñado de personas. Estamos "delegando" nuestras obligaciones ¿porqué? ¿Demasiado trabajo alienante que no nos da tiempo para reflexionar? ¿sociedad volcada en el placer como instrumento de evasión del proceso destructivo que supone, en general, vivir en esta sociedad que hemos permitido que nos construyan? De esta manera, dejando que nos lleven los "expertos" y estancándonos en la comodidad de no tomar decisiones como pueblo, es como esta sociedad, en vías de destrucción, pide que la gobiernen. Sí, hemos llegado al punto de que no nos podemos gobernar como pueblo y nos tienen que guiar los "expertos". Por esa razón da igual el partido político que llegue al poder, porque hará lo que quiera y nos venderá la salvación como tantas veces en la historia, salvo cuando el pueblo se ha revelado. No me refiero, necesariamente, a revelión violenta, sino a la desovediencia y la autosuficiencia en la medida de nuestras posibilidades, que son muchas más de las que creemos, por ejemplo.
    El respeto, sino miedo, que me dan todos los partidos es que aumentan siempre el apartato del poder y esto sólo es posible disminuyendo el del pueblo, que en este caso es voluntario y demandado, cuando otras veces ha sido impuesto.
    Realmente, tenemos que hacer cambios en todas las esferas, pero la más importante y la única efectiva es el cambio individual y, por ende, el colectivo, nunca al contrario que es como Podemos está despegando, aunque aparente lo contrario. Podemos no nos va a salvar sino nos salvamos nosotros. Este partido como tantos otros en momentos de cambios promete cosas que no puede cumplir y divaga en lo demás.
    Todo tiene que partir del pueblo, pero de un pueblo instruído y reflexivo. Y no lo tenemos. El ejemplo más claro es intentar hablar con cualquiera, salvo raras excepciones, de cualquier tema político; todos se posicionan en un bando o en otro, según el partido político y sus ideólogos opinen. Es como ir a un restaurante y que te lo den todo hecho durante toda tu vida y un buen día decides hacerte la comida tú, suerte si consigues comerte lo que cocinas, de pronto, empiezas a darte cuenta de lo complicado del asunto y de que vas a necesitar tiempo para cocinar, y por lo tanto, quitárselo a otra actividad como el trabajo. Pero no, antes de dejar de trabajar, no te preocupes que en el súper te dan comida precocinada para el microondas y, solucionado. Estas son las únicas soluciones que nos puede traer un poder estatal a falta de uno de verdad, del pueblo, que debe empezar sobre las bases de la privacidad y la individualidad y nuestro entorno cercano. Lo demás es marear la perdiz.
    Otro peligro es instaurar, como así será, la votación cibernética para todos los temas para así hacernos partícipes a todos. Es una entelequia porque no estamos preparados para ello y por lo tanto, serán cuestiones fáciles, sin complicaciones profundas, y por lo tanto, manipulables. Será el salto digital de la democracia, para dar otras dos o tres décadas más de lo mismo con la apariencia de otra cosa.

    ResponderEliminar




  8. Hola señores. Soy Carlos Otero Schmitt, nieto de Carl Schmitt, y asisto asombrado, ya desde hace tiempo, a la cantidad de falsedades y, sobre todo, falta de estudio serio e información sobre sus ideas, que queda patente, por ejemplo, en la inclusión de fotografías donde él no aparece, simplemente porque se trata de alemanes militares en la época nazi. O comentarios como los de Manuel Rivas cuando dice que fue embajador en España, o cuando hable de una tertulia en las afueras de Santiago. Él sabe a qué me refiero.
    la historia intentó juzgar a Carl Schmitt por su vinculación por el nazismo, con el simple argumento de que él que estuvo en Alemania que entonces era nazi ¿Todos los alemanes lo eran? Es cierto que hubo una vinculación, pero simplemente porque su análisis del poder y de la democracia interesan, de forma sistemática, a los gobernantes que dudan del devenir actual de la democracia.
    Hemos generado un mundo occidental en el que la corrección política impide decir lo que en realidad se piensa, donde se menosprecia a un rival político sin pensar el los ciudadanos que lo han votado, y en el que la actividad política se esfuerza más en ofender al contrario que en proponer. Esto mismo ocurría en la Alemania de los años veinte, un parlamento ineficaz, chabacano y que se consumía en personalismos y conchabeos con la única finalidad de conservar el poder, pero no de solucionar auténticos problemas. ¿Les recuerda a algún país actual?.
    Al inicio de la guerra Carl Schmitt no conservaba ya ninguno de sus cargos públicos salvo la cátedra de derecho político en Berlín, por sus enfrentamientos con el partido, y también por profesar la religión católica entre otras cosas.
    Su propuesta de democracia, pero firme y no obcecada con determinados derechos de los más débiles, o no tanto, es en mi opinión más que acertada. Hoy algunos sustentan su ideología simplemente en que todo es derecho ¿Y la obligación? Es muy fácil vender eso sin aportar soluciones.
    Mi abuelo me ayudo a ser persona en muchas cuestiones, por ejemplo cuando me enseño que el prójimo no es la humanidad, es el próximo, el cercano, o cuando me inculcó un lema, tantum vales cuantum tibi vim impones, o cuando me explicó la diferencia entre legalidad y legimidad, entre autoritas y potestas ...
    Quién lo analice solamente por vivir en el lugar y la época en que vivio, no es más que un ignorante. Y la historia lo demuestra, sigue vivo.

    ResponderEliminar
  9. Hola soy doctorando en politica y creo que el que ha escrito esto no ha leido nunca a Schmitt, para empezar pones frases de Clauswitz que el propio Schmitt critica, "la guerra es la continuación de la política con otros medios" queda mal intentar comparar elementos de la actualidad con autores que no se han leído, un poco de seriedad

    ResponderEliminar