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La censura progre e izquierdista en acción

Recojo (y suscribo) aquí el texto de denuncia de Félix al diario “El País” por ocultar nuestro libro sobre el 15M y mencionar tan solo aquellos que se adscriben a su proyecto político, falsificando la realidad de que en el movimiento 15M coexisten tendencias muy diversas y en muchos casos enfrentadas, lo que demuestra el ánimo manipulador del emporio empresarial progresista del que forma parte “El País”.


LA CENSURA PROGRE E
IZQUIERDISTA EN ACCIÓN


Si hay un medio de comunicación que vulnere por sistema la libertad de conciencia de sus lectoras/es es "El País".

Su concepción estratégica como instrumento de adoctrinamiento y manipulación de las mentes le veda la objetividad e imparcialidad en un grado superlativo. Lo suyo son las religiones políticas, como preámbulo a un número casi infinito de operaciones de ingeniería social, destinadas a hacer más sólido el actual régimen de dictadura constitucional, partitocrática y parlamentarista, y más próspero al capitalismo.

Pero lo cierto es que este diario tiene cada día más dificultades para conectar con las nuevas generaciones, que se sienten bastante alejadas de sus rancios y anticuados dogmatismos. Sus doctrinas sí es que tuvieron alguna relación con la realidad hace 50 años hoy la han perdido casi del todo. Ahora es el diario de la tercera edad izquierdista, trincona y pancista, vale decir, pro-capitalista de un modo convulsivo, como le sucedió al "Arriba" falangista en los últimos años del franquismo.

Por tanto, nadie ha de extrañarse de que en este chapucero artículo "falte" el libro "Pensar el 15-M y otros textos", de Prado Esteban, Frank G. Rubio y mío (editorial Manuscritos), a pesar de que ha sido leído con interés dentro del Movimiento 15-M, y ha dado pie a numerosos actos públicos, en lo que a mi respecta el último en Guadalajara, hace unos días, y el próximo en Burgos, dentro de unos días.

¿Qué lleva a la patulea progre a faltar así a la verdad?

 Pues, ante todo su odio a la revolución y su espíritu aleccionante y censor sin restricciones. Pero hay más: su odio al pensamiento. Es el no-pensamiento lo que preconiza la izquierda, que sustituyó al franquismo en 1975 (de ahí que "El País" sea el continuador en las nuevas condiciones del "Arriba") y persiste, como su heredero, en impedir el pensar libre.

Del libre pensar saldrá la revolución que va a poner fin a la sociedad del adoctrinamiento de las masas, a la dictadura ideológica de "El País", edificando una comunidad humana fundamentada en la libertad de conciencia, la libertad interior de la persona y la libertad de expresión.

El diario "El País" quiere un 15-M de memas y memos que agitan las manitas mientras escenifican parodias de debate y realizan "asambleas" de parvulario. Nuestro libro apuesta por un Movimiento de regeneración integral de la vida social, sin separaciones entre izquierda y derecha, entre mujeres y hombres, entre jóvenes y mayores, con todo el pueblo unido contra el Estado y los poderes económicos. Un Movimiento sólido, sin ñoñerías ni seniles recetas izquierdistas, que haga frente a la crisis general múltiple de nuestra sociedad, para reconstruirla, rehacer a la persona y reformular el sistema de creencias y valores.

Esta izquierda senil, este progresismo vetusto, esta rancia modernidad (paleomodernidad ha dicho alguien), está en un delicado momento. Dedicada a gozar y a disfrutar gracias a lo que logra con sus actividades predatorias ya es incapaz de crear nada nuevo. Por eso nuestra hora ha llegado.


                                                                         Félix Rodrigo

9 comentarios:

  1. "Memas y memos agitan las manitas mientras escenifican asambleas de parvulario""

    Felix Rodrigo, otro que no ha entendido nada de nada pero quiere sacar tajada, claro, y viene a hablarnos de su libro.

    No se puede esperar otra cosa de un enamorado de sí mismo que dice en su autobiografía:

    "...está comprometido desde los 18 años en esfuerzos, metas y
    combates sociales, políticos, medioambientales, morales, epistemológicos, reflexivos y
    culturales. Ello le ha forzado a llevar una existencia dura y difícil, en ocasiones
    peligrosa y casi siempre en el borde de lo soportable..."


    Ya ven, todo un héroe. No lo dice cualquiera, lo dice él.

    ...qué lástima.

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  2. Manipular las palabras del contrario no es una forma correcta de debate o controversia, Félix dijo “el diario “el País” quiere un 15-M de memas y memos que agitan las manitas mientras escenifican parodias de debate y realizan “asambleas” de parvulario” y no “memas y memos agitan las manitas mientras escenifican parodias de debate y realizan “asambleas” de parvulario”
    Mucha gente que hemos participado activamente en el 15-M pensamos como Félix y hemos asistido, no sin dolor, al espectáculo de cómo la hipersubvencionada máquina de la izquierda desembarcaba en el movimiento para liquidarlo, como lo lleva haciendo con todo lo que se mueva desde la transición.
    El problema no es si Félix peca de inmodestia sino si su análisis se corresponde o no con lo real, el uso de la descalificación y el olvido del argumento, el análisis y la investigación de la realidad es una falta de respeto al lector ¿Nos toman por tontos?

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  3. Es cierto que tiene algo de ególatra,pero no es menos cierto que una verdad dicha por un ególatra no dejará de ser verdad.¿Quién les ha dado el salvoconducto a los Garzones,Torres y Sampedros para poder hacer y decir lo que les venga en gana?Todo el que firma un libro,obra de arte,etc. tiene un problema con el ego,pero al menos Rodrigo Mora tiene la decencia de decirnos que las mejores obras son las que no tienen firma;que el pueblo,antaño,fue creador de cultura,de arte,de la forma de regir sus propias vidas.También nos dice que todos debemos crear nuestra cultura,nuestra sabiduría,mediante la autogestión del saber y el conocimiento.Yo llevo años haciendo esto,sin embargo no tengo la necesidad de escribir ni firmar nada.

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  4. Felix Rodrigo no es, en absoluto, mi contrario ni nada que se le parezca, ni he manipulado sus palabras.

    Su opinión sobre las asambleas del 15M quedan muy claras, por ejemplo, aquí, página 3 y siguientes. Felix habla de la gente que participa en el movimiento como personas que van a las asambleas o a los actos y luego vuelven a casa a ver televisión. Habla de las asambleas como llenas de trivialidades, simplistas, de un dramático nivel intelectual y como un relejo del embrutecimiento de las masas en la contemporaneidad, entre otras lindezas. No lo digo yo, lo dice él. Él, claro, nos da luego lecciones de qué y cómo debe ser una asamblea de verdad, de cómo se es un buen revolucionario.

    Pero, en mi opinión, se equivoca. No se puede acertar nunca, nunca, si se desprecia a la gente. Y hay en los textos de Felix Rodrigo un desprecio visceral por los demás, un engreimiento monumental y un ego a todas vistas enfermizo. Felix Rodrigo, a juzgar por sus palabras, se considera superior. Felix Rodrigo desprecia a la gente y la juzga alegremente. Así nunca se acierta por mucha razón que se pudiera llevar. Es lo mismo que pasaba con el, felizmente cerrado, blog "el antimperialista", por ejemplo. Se habla desde pedestales repartiendo mierda al resto de los mortales. Resulta patético. Siempre es un error.

    No conocía a Felix Rodrigo ni, por lo que veo, me perdía nada. Simplemente no me interesa. Críticas sobre el movimiento he leído en este año cientos, las más descarnadas siempre desde la izquierda que se considera más revolucionaria, más pura, más... MÁS. Da pena y resulta, también, patético.

    Yo he visto lo transformador que está resultando el movimiento. No desde un pedestal, en la calle, en las plazas, con la gente. Cómo en este año ha ido cambiando gente con nombres y apellidos. Gente normal, que es lo que a mí me interesa. Cómo hemos ido creciendo todastodos juntos, cada día, en el trabajo dentro del movimiento. Eso es lo realmente importante, lo realmente transformador. Los puristas pueden seguir escupiendo. Nosotros, nosotras, mientras, seguiremos trabajando. Cada día, todos los días. Con nuestros errores. Con nuestros aciertos.

    Un saludo.

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  5. Estoy de acuerdo con algunas de las cosas que expones,pero al Cesar lo que es del Cesar.Yo he estado en el 15M y ya me cansé de salir a pedir.Además,estuve en algun caso pensando quea todos iban más o menos de lo mismo que yo y eso no es así.La mayoría de la gente quiere tener el consumo de antes;esto es un mayo del 68 en el 2011.Lo siento,pero por ahí no paso.Yo tampoco estaba de acuerdo con el consumo descerebrado de antes y por supuesto,a estas alturas de la película tampoco lo voy a estar.Prefiero perder un año pensando lo que hacer,que no toda la vida dando tumbos.Yo no hago el juego al PSOE.Que se lo hagan ellos.
    La gente esta hasta las narices del PP.¿Ahora qué?¿toca el PSOE?

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  6. Kum,
    te recomiendo el siguiente artículo: http://gorribeltzean.wordpress.com/2012/05/10/sobre-la-critica-a-los-textos-de-felix-rodrigo-mora/ y también: http://felixrodrigomora.net/DELACRITICA.pdf

    Conozco a Félix en persona y te puedo decir que sorprende su modestia y afabilidad....pero lo cortés no quita lo valiente;)

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  7. No se puede acceder a ese artículo, Laieta. Gracias de todas formas.

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  8. Bien, una vez leídos los dos artículos, te comento, laieta:

    El primero no me hace sino preguntarme por qué alguien necesita escribir un artículo como ese, algo así como limpiando el buen nombre de Felix Rodrigo contra acusaciones de anarquista, superficial, machista, racista u homófobo.

    Repito que no conocía nada de Felix Rodrigo hasta leer este artículo en este blog, ni tengo interés alguno en criticarlo, difamarlo o todo lo contrario (luego sí he leído algunas cosas para ver quién es, qué dice y cómo lo dice). Simplemente no me interesa su discurso, sobre todo por su tono. Seguramente todas esas acusaciones de las que habla el autor del artículo le vienen a Felix Rodrigo por el tono con el que defiende sus teorías.

    El artículo que me propones de Felix Rodrigo sobre la crítica, me muestra una nueva dimensión de él: parece hacer todo lo contrario de lo que predica. En las charlas y textos que le he escuchado y leído estos días, hay siempre una agresividad, una ironía, un desprecio, que él mismo descalifica en su idea sobre la libertad de crítica.

    Insisto, no tengo nada contra este señor. No me interesa, punto. creo que ya le he dedicado demasiado tiempo. Dejo aquí pues este debate.

    Saludos y gracias.

    Nos vemos en las plazas.

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  9. Me gustaría saber cuántos del 15M se han puesto la camiseta o han llevado la bandera de España por capa.Sé de gente que se considera libertaria y lo ha hecho.Esto sí que da pena.

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